martes, 13 de septiembre de 2011

Pinto mi sonrisa.

Aquí estoy, aparentando lo que no soy, intentando sacar esa sonrisa día a día, una sonrisa falsa, sin sentimiento, pintarla así porque si, sin ganas. Esa máscara, esa puñetera máscara que llevo todos los días de mi vida, una máscara que no sirve para nada, solo para ocultar mis sentimientos y esperar el día en el que explote definitivamente.
Día tras día, intento recordar buenos momentos, ahí es cuando me sale mi sonrisa verdadera, pero después se me viene todo encima y me entran unas ganas tremendas de llorar y es ahí cuando me pongo mi máscara y pinto una sonrisa con permanente, así no se borrará nunca. Falsas apariencias.



No hay comentarios:

Publicar un comentario